Soy una treintatodista feliz

¡Soy una TREINTATODISTA feliz! :) A cierta edad…

«Cuando me dicen que soy demasiado viejo para hacer alguna cosa,

procuro hacerla enseguida»

Pablo Picasso

 

Dicen que a cierta edad las mujeres nos hacemos invisibles, que nuestro protagonismo en la escena de la vida declina, y que nos volvemos inexistentes para un mundo en el que sólo cabe el ímpetu de los años jóvenes.

 

Yo no sé si me habré vuelto invisible para el mundo, es muy probable, pero nunca fui tan consciente de mi existencia como ahora; nunca me sentí tan protagonista de mi vida, y nunca disfruté tanto de cada momento.

 

Descubrí que no soy una princesa de cuento de hadas. Descubrí al ser humano que sencillamente soy, con sus miserias y sus grandezas.

 

Descubrí que puedo permitirme el lujo de no ser perfecta, de estar llena de defectos, de tener debilidades, de equivocarme, de hacer cosas indebidas, de no responder a las expectativas de los demás y, a pesar de ello, quererme mucho y aún amar, sentir, vibrar.

 

Cuando me miro al espejo, ya no busco a la que fui en el pasado. Sonrío a la que soy hoy. Me alegro del camino andado y asumo mis contradicciones.

 

Siento que debo saludar a la joven que fui, con cariño, pero dejarla a un lado; porque ahora me estorba. Su mundo de ilusiones y fantasía ya no me interesa. Me interesa ser yo, aquí y ahora.
Qué bien no sentir ese desasosiego permanente que produce correr tras los sueños. Qué bien poder disfrutar del silencio y de los pensamientos.

 

Qué lindos son los recuerdos y sonreír tras ellos.

 

La vida es tan corta y el oficio de vivirla es tan difícil, que cuando uno comienza a aprenderlo, ya hay que morirse.

 

Por eso trato de vivirla a plenitud como si hoy fuera el último día, gozando cada minuto, cada momento, cada «te quiero», cada rayo de sol que me acaricia. Y tan solo puedo dar gracias a la vida por toda esta maravilla.

 

Aunque me hubiese encantado hacerlo, este texto tan maravilloso no lo he escrito yo, llegó a mis manos sin firma, y no he conseguido averiguar quien es su autora, pero le estoy eternamente agradecida por lo que me ha hecho sentir al leerlo. No he querido dejar de compartirlo porque me siento reflejada en cada una de sus palabras, y porque quizás a ti, también te haga sentir cosas bonitas.

 

La edad, cuantas cosas se dicen y se dirán sobre ella, que si sólo es un número, que la edad no es lo que marca nuestro espíritu, que la edad nos hace sabias, sea como sea la mía, mi edad es de 40, cuarenta, c-u-a-r-e-n-t-a y puedo decir que ¡soy una treintatodista feliz! 

 

Hoy puedo decir, que cada vez más, me quiero y me acepto como soy, con mis virtudes (algunas) y con mis defectos (bastantes), y al fin y al cabo de eso va la vida, de dar y recibir amor, empezando por uno mismo, no podemos querer ni cuidar a los demás, si antes no nos queremos y cuidamos a nosotros mismos. A mis cuarenta he cometido muchísimos errores y afortunadamente los seguiré cometiendo y aprendiendo de ellos.

 

Anda, ¡cuéntame! ¿Te ves reflejada? ¿Compartes estas palabras?

 

¡Que el día te sonría! ;)

Un abrazo enorme

Helena Ruiz Pino

 

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