JUEGOS PARA NIÑOS TARRO DEL ABURRIMIENTO

Infinitos juegos para niños en uno solo: El tarro del aburrimiento

“¿No es la vida cien veces demasiado breve para aburrirnos?”

Nietzsche

Último madrugón, unas pocas horas más en el cole y… ¡vacaciones! ¡Qué ganas! ¡Todos juntos un montón de días! ¡Qué bien!… ¿Qué bien? Este es el momento en el que seguramente, como yo, arqueas las cejas y vislumbras esos “¡Mamááááá, me aburroooo!” tan característicos de las vacaciones y tus búsquedas apresuradas en Google de “Juegos para niños” después de haberte quedado sin más ideas para improvisar… Momentos, al fin y al cabo, que si no son bien gestionados pueden llevar a episodios de enfado y rabieta, que cambien el disfrute en la relación con tus hijos y el descanso de las vacaciones por una buena dosis de estrés.

¡Pero no paniquemos! Al igual que en Navidad preparamos una batería de buenas opciones para entretenernos en cualquier lugar, ahora os propongo una actividad que nos puede dar ideas infinitas para afrontar los me-aburro más persistentes. ¡Atentos!

El aburrimiento también es parte de los juegos para niños

Cuando hablo de ideas infinitas no me estoy refiriendo a tener que planificar a menos de 24 horas un montón de actividades para llenar todos los huecos de estos días festivos. ¡Para nada! Las vacaciones lo son para todos y los niños tienen tanto derecho como nosotros a descansar de sus múltiples actividades y rutinas diarias.

Es más, hay que tener bien presente que aburrirse ¡también es bueno! La facilidad con la que los niños se aburren es un proceso normal ya que los pequeños cuentan con una capacidad muy limitada de enfocar su atención: por eso rápidamente se distraen, cambian de actividades y juegos de manera rápida y frecuente e, inevitablemente, se aburren… Pero es gracias al aburrimiento al que también se potencia de manera vital su creatividad, ya que les impulsa tanto a buscar otra manera de hacer las cosas, como directamente a hacer nuevas cosas. Y de ambas formas se fomenta su proceso de aprendizaje.

Dicho esto, tampoco se trata de dejar que ese aburrimiento campe a sus anchas hasta provocar reacciones negativas en tus hijos. Si no de crear alternativas, nuevos juegos para ellos, con las que ayudarles a gestionar de forma positiva ese estado. Si lo hacemos además, implicándolos desde el principio para que las actividades les resulten lo más motivadoras posibles… ¡Bingo! ¡Reto superado!

Se trata de que hagamos una lista de actividades que después pondremos en bonito y que cada vez que se aburran podamos rescatar. ¿por dónde empezar?

Rescata esos pobres juguetes/juegos abandonados

¿No te parece increíble cuando tus hijos te dicen que se aburren a pesar de tener miles de millones de cosas con las que entretenerse?

Mi primera reco es que juntos empecéis a revisar armarios, cajas, estanterías o cualquier otro sitio donde tengáis guardados juguetes/juegos/manualidades… y que hagáis una primera lista con ellos, muchas veces los niños no saben a que jugar simplemente porque ni si quiera se acuerdan de las cosas que tienen y de paso eso os servirá para hacer limpieza de las cosas que ya no van a usar y por ejemplo donarlas a niños que sí las vayan a usar. Esto una manera magnífica de enseñar a nuestros hijos a compartir y de paso simplificarnos la vida. Además de rescatar lo que ya tienes…

La clave es planificar con adelanto y en compañía de tus hijos: pídeles ayuda para generar un montón de ideas sobre sus juegos favoritos

Y es que en los momentos en que se bloquean y ya no saben qué hacer y llega ese temido “Mamááááááá me aburro”… ¿cómo saber qué proponerle a tus hijos que les resulte interesante para que cambien la actitud? Para estar preparada, pídeles durante unos días antes (o incluso los primeros días de vacaciones, que suelen estar más entretenidos) que te ayuden a crear una lista de sus entretenimientos y juegos favoritos: colorear, bailar, ver fotos, hacer manualidades, disfrazarse, actividades de naturaleza… ¡las posibilidades son muchas!

Una vez tengas una lista más o menos completa de estas actividades que tenderán a ser bastante genéricas, trata de sacar opciones más concretas, casi pequeños retos, de cada una de ellas. Por ejemplo, si pensamos en colorear:

>hacer un autorretrato

>hacer un dibujo para cada miembro de la familia

>imaginarse un dibujo en el que solo se puedan usar tres colores

>probar una forma nueva de pintar, como acuarelas o ceras

>un concurso de pintura de cara, ¡que incluso puede tener alguna temática concreta!

>pintar la silueta del pie de cada miembro de la familia y sobre ella pintar una cara

 

¡Y así hasta el infinito con cada una de las opciones!

Bueno, hasta el infinito igual no… pero estoy segura de que reunirás un buen puñado de propuestas 😊

Un montón de juegos para niños… ¡y un tarro para aglutinarlos a todos!

Y así llegamos al tarro. Al famoso tarro. Al Tarro del Aburrimiento. Así, con mayúsculas.

Se trata de que pases todas las opciones de juegos para niños de esa lista a papeles individuales: cada opción en su papel. Y todas esas papeletas vayan dentro de un tarro. ¡Cuántas más mejor!  Yo en mi caso en vez de con papeles lo tengo con palitos pero elige lo que más te guste.

¿Y qué hacer después? Pues dejar el tarro en un lugar visible y accesible. Y cada vez que un me-aburro se acerque por estribor… solo abrir el tarro y ofrecerles que cojan una papeleta para disfrutar juntos de un nuevo reto.

Juegos para niños de todas las edades

¿Lo mejor de esta actividad? ¡Que es totalmente adaptable!

Si vuestros hijos comparten intereses y edades parecidas, pueden usar el mismo tarro. Pero también se puede plantear uno específico para cada uno si su tiempo de ocio suele ser más individual debido a la diferencia de edad. ¡E incluso se puede hacer uno familiar con actividades compartidas por todos! ¡O uno solo versión adulta!

Solo tenemos qué pensar a quién irá dirigido y qué actividades podrían resultar motivadoras para él o ella.

Y una vez más, implícalos desde el inicio: que te acompañen a comprar un tarro chulo; o a decorar en una tarde de manualidades uno que haya por casa. El resultado es genial, pero el proceso es también maravilloso. También podemos escribir con ellos las actividades en papeles en colores en función de la familia a la que pertenezcan (colorear en papel azul, baile en papel rojo, disfraces y teatro en verde, etc.): de esta forma, aunque el reto que toque sea una sorpresa tus hijos tendrán poder de decisión en elegir algo que más o menos les apetezca en ese momento. 

¿Qué os parece? ¿Quién se lo apunta para conseguir tardes sin aburrimiento sin fin? ¿Qué ideas de actividades se te ocurren?

Déjamelas aquí en comentarios o en redes sociales con el hashtag #reconectadándolealtarro y haré una recopilación para compartir entre todas, ¡que muchas piensan mejor que una sola!

Y si el tarro te sabe a poco… no dudes en aprovechar la esta semana para seguir el videotraining Recupera la calma y el disfrute en la relación con tus hijos, donde encontrarás claves muy potentes para reconectar con tus hijos.

¡Felices y entretenidas vacaciones!

Helena Ruiz Pino

 

2 Comentarios
  • María Jesús Ramírez
    Publicado a las 10:40h, 12 agosto Responder

    Hola Helena, me ha encantado la idea del tarro. Lo pondré en práctica. Gracias por tus correos. No suelo contestarlos pero estoy muy agradecida y son para mi de mucha ayuda.
    Gracias y espero que estés pasando unas merecidas y buenas vacaciones.
    Un saludo, María Jesús.

    • Helena
      Publicado a las 14:59h, 13 agosto Responder

      Cuanto me alegro de que los correos te resulten útiles. Millones de gracias por comentar, se agradece muchísimo saber que hay alguien al otro lado. Buen verano para ti también! :)

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